ARMAS QUÍMICAS Y BACTERIOLÓGICAS

INTRODUCCIÓN:
Las guerras químicas y biológicas no son un invento reciente. Ya en el año 1346 los Tártaros catapultaban cadáveres de personas que habían sido víctimas  de la peste bubónica dentro del perímetro de la ciudad, provocando así el rápido contagio entre los habitantes.          

En 1763, el Coronel Británico Henry Bouget, propagó la viruela entre las tribus indígenas hostiles de EEUU, entregándoles frazadas de hospital contaminadas. Más acá en el tiempo, durante la Primera Guerra Mundial, la utilización del gas Mostaza sembró el terror entre los combatientes. Del mismo modo en Vietnam se conoció el famoso Agente Naranja.

En los acontecimientos del comienzo de este siglo, también el mundo se vio amenazado con el uso de este tipo de armas por parte de los países en conflicto, sin duda a medida que pasa el tiempo, el ingenio de los científicos, se ve más desarrollado y perfeccionan cada vez más estas armas letales.

DESARROLLO:
En el grupo de armas Biológicas / bacteriológicas se incluyen: (Ántrax, Botulismo, Plaga; Viruela, Tularemia y F.H.V.), dentro de las posibles armas Químicas se pueden llegar a utilizar  en una guerra o un ataque: gas Mostaza, gas Cloro, gas Sarín y el compuesto tóxico VX.

ARMAS BIOLÓGICAS:
ÁNTRAX: Los síntomas del  Ántrax: son difíciles de diagnosticar. Dependiendo del lugar del cuerpo donde se aloje la espora, hay tres tipos de síntomas:
a)Ántrax Cutáneo: se produce una lesión en la piel que no parece ser seria.
b) Ántrax Intestinal: causado por el consumo de carne contaminada, que se manifiesta con fiebre y septicemia, y puede llegar a ser mortal.
c) Ántrax Respiratorio: se manifiesta cuando las esporas son aspiradas y se alojan en los pulmones. Si esta no es tratada a tiempo traerá consecuencias graves.

TULAREMIA: Es una de las bacterias patogénicas mas infecciosas. Es una enfermedad contagiosa que afecta principalmente a las liebres, conejos silvestres y que en determinadas circunstancias puede transmitirse a personas. Si no se trata, el paciente experimenta una debilidad progresiva y puede fallecer en apenas dos semanas.

BOTULISMO: Esta toxina, la más letal que el hombre conoce, puede ser inhalada o ingerida por alimentos o agua contaminada. Los síntomas que desarrollan son: visión doble, habla mal articulada, boca seca y debilidad muscular. Los síntomas comienzan desde las seis horas de exposición hasta dos semanas después, y pueden causar parálisis de los músculos y vías respiratorios en veinticuatro horas.

VIRUELA: Este virus fue erradicado del mundo en el año 1977, aunque algunas de sus cepas se han conservado en laboratorios de Rusia y EEUU. Este se puede propagar  a través de la saliva o por personas infectadas, y los síntomas más comunes son: fiebre, fatiga y dolores musculares, seguidos por un sarpullido con lesiones y que pueden llegar a causar la muerte en las dos primeras semanas de la enfermedad.

ARMAS QUÍMICAS:
GAS MOSTAZA:  Fue utilizado en la Primer Guerra Mundial, es un agente letal que produce ampollas en todo el cuerpo. A pesar de ser incoloro cuando es puro, generalmente tiene un color amarillento o marrón y un ligero olor a mostaza. Se absorbe por los ojos y las membranas mucosas.
No existe antídoto, y la descontaminación de todas las áreas potencialmente expuestas tendrá que ser inmediata, como único sistema para reducir el daño.

GAS  SARÍN: Es un compuesto altamente tóxico. Penetra en el cuerpo por inhalación, ingestión y a través de los ojos y piel. Los síntomas suelen tratar secreciones nasales abundantes, ojos llorosos, pérdida de visión, nausea, vómitos y dolores de cabeza. Mata a sus víctimas atacando músculos y glándulas voluntarias del cuerpo.

GAS VX:  Es un compuesto altamente tóxico en su forma líquida y gaseosa que ataca al sistema nervioso central. El VX se puede inhalar o ingerir. Los síntomas incluyen: secreciones nasales abundantes, ojos llorosos, exceso de sudoración, dificultad al respirar, visión borrosa y nauseas.
Sin embargo existe un antídoto bastante simple: un tratamiento inmediato de descontaminación, quitándose la ropa y lavándose cara, ojos y todo el cuerpo con agua.

CONCLUSIÓN: Este tipo de armas  es de otro tipo de guerra, una guerra no convencional, cuyo principal objetivo es el de crear pánico y destruir económica, física y psicológicamente al rival, y ésta vez, no hay Ejércitos, ni mísiles, ni tropas desplegándose por el frente de batalla.

Solo minúsculas bacterias, que atacan a un enemigo desprevenido. Es una amenaza de destrucción masiva, la cual hay que combatir desde tres puntos básicos:
1-Información
2-Instrucción
3-Prevención.